sábado, 29 de octubre de 2011

Entrevista a Kutxi Romero (2/2)



He aquí el resto de la entrevista a Kutxi Romero. Os recuerdo que se la hice hace ya tres semanas, así que no puedo menos que sorprenderme por el poder profético de este hombre, pues el lunes José Ändrea, vocalista de Mägo de Oz, anunció que abandonaba el grupo... Pensaréis "¿y eso qué tendrá que ver con la entrevista?". Seguid leyendo y lo comprenderéis.

Aprovecho para deciros que también pude entrevistar a Huecco, y que tengo otra entrevista preparada a Jevo, de El Reno Renardo, que os iré subiendo poco a poco...

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P: Pasando a la parte más personal... No eres el único de tu familia que está metido en el mundo de la música... Tu hermano Martín es el vocalista de Bocanada, y tu hermana Maribel se ocupa de su merchandising...
R: Sí, y es bailaora de flamenco, también.

P: ¿Por qué ese gusto por la música?
R: Pues no sé... En mi casa mi abuelo cantaba muy bien, y mi madre sigue cantando... Siempre hemos escuchado música en casa, desde pequeños, y además somos una familia andaluza, muy farandulera, y entonces bueno, supongo que eso se queda. Y a pesar de que no hemos heredado ninguno de los hermanos la voz limpia de mi abuelo o de mi madre (risas), pues bueno, pues nos estamos buscando la vida bastante bien.

P: Te iba a preguntar también, precisamente, por ese gusto que tenéis en Marea por lo andaluz, lo gitano... De hecho, en “28.000 Puñaladas” hay una versión de un poema del “Romancero Gitano” de Lorca.
R: Así es. Yo soy el primer descendiente navarro de mi familia; todos ellos eran andaluces, y tuvieron que emigrar por hambre. Entonces, desde pequeño en mi casa oía mucho flamenco, he estado mucho en Andalucía, tenemos casa por allá... Se quedan muchas cosas, hay mucho poso andaluz en mis canciones, a pesar de ser una banda de rock n’ roll que no hacemos nada de flamenco en ningún momento.

P: ¿Contemplarías trabajar en algo que no fuese la música?
R: Bueno, si no fuese por el rock n’ roll yo estaría muerto, seguramente. Entonces, partiendo de eso... una vez muerto todo lo demás importa poco (risas). No, si no fuera por el rock n’ roll estaría muerto seguro, vamos, pero más que seguro. Y el rock n’ roll casi me mata alguna vez, pero todavía no lo ha conseguido... Pero vamos, lo está intentando.

P: Además de la música, también te gusta la poesía, algo no demasiado normal hoy en día... ¿Qué te hizo acercarte a ese mundo?
R: Hombre, yo nunca he sido muy normal, tampoco, entonces me alegra que me digas que no es muy normal, porque ya te digo, yo normal, normal no he sido nunca. Y la poesía en sí... me gusta como algo tangible, para que me entiendas. Me gusta la gente cuya poesía... A ver, la poesía como concepto, como ente, me parece un coñazo de puta madre. La obra entera de un poeta, de cualquier poeta, generalmente suele ser un peñazo muy importante. Entonces, lo que sí que me gusta son cosas puntuales de poesía y esa gente que con poco sabe decir mucho. La poesía, como economizar palabras para decir muchas cosas, me parece siempre algo muy curioso. Yo tengo que utilizar muchas palabras para poder explicarme, y la mitad de las veces ni se me entiende (risas).
>Pero bueno, en la poesía hay cosas que me siguen pareciendo curiosas. Hay poetas que me gustan, en general... Pero no estoy todo el día leyendo poesía, eso es un peñazo... Tiene que ser para morirse de asco, tío. A mí lo que más me gusta en el mundo es echar la siesta, ahí sí que soy bueno. Me echo unas siestas que se giña Manolo, ese es mi verdadero arte. Unas siestas maravillosas... En otras cosas no creo que sea muy bueno, pero echando siestas, probablemente de los mejores del mundo, si no el mejor (risas).


P: Bueno, y aparte de echarte siestas... Llevas ya catorce años con Marea, desde 1997.
R: Sí... Catorce años durmiendo (risas).

P: Seis discos de estudio publicado, además de dos recopilatorios y un directo, y aunque a lo mejor no sois de los más famosos y conocidos, desde luego sois de los más queridos del rock nacional... ¿Cuál es la fórmula del éxito?

R: Pues la honestidad, siempre. Ser honesto y sobre todo contigo mismo. La honestidad es algo sine qua non. Tiene que ser inherente a todas las facetas de la vida, y más al rock n’ roll. Y cuando la gente ve que eres honesto, o el público ve que eres honesto contigo mismo y con ellos, entiende la historia perfectamente. Nosotros somos muy honestos, no estamos todo el día por ahí haciendo el bobo. Simplemente hacemos canciones guapas, y ya está, y de hecho no somos ningunos figurines, ni venimos de un estrato social alto ni nada, tío. Somos obreros de barrios marginales que hacemos música, hacemos canciones, y la gente lo ha entendido... o tenemos la suerte de que hay muchas personas a las cuales les gustan las canciones que hacemos. Y ya está, todo lo demás es literatura, puta literatura...

P: Además de Marea, tienes otros proyectos paralelos, un disco con la banda Ja Ta Já, por ejemplo, y un gran número de colaboraciones que han ayudado a dar impulso a artistas más o menos desconocidos... ¿Es más fácil trabajar con tus compañeros de Marea o con músicos a los que no conoces tanto?
R: Bueno, a mí me resulta siempre fácil, sencillo, mientras no me suponga esfuerzo quiere decir que está bien la cosa. A mí si no me supone algo un esfuerzo, es que la cosa está saliendo bien. Entonces, colaborar siempre se me ha dado guay, porque me invitan a cervezas, nos reímos un montón, pego cuatro gritos... Aunque bueno, luego generalmente tengo el bagaje de que cada disco en el que colaboro, ese grupo después, directamente, alcanza las más altas cotas de fracaso una vez que ha colaborado conmigo. Entonces la gente se debería pensar un poco el llamarme cuando va a hacer un disco, porque todos los grupos con los que he colaborado, o un alto porcentaje, no se han comido un turrón (risas). Igual la culpa es mía, tío. Y últimamente me llaman menos, yo creo que es por eso. Bueno, por eso, y porque ya no quedan muchos grupos con los que haya colaborado (risas). Creo que he cantado en... 120 discos, o algo así, aparte de los míos. No está mal, oye... Para mi hijo, cuando sea mayor... (risas).

P: Bueno, Mägo de Oz, con quienes colaboraste en “Gaia III”, ahí siguen, no se han venido abajo.
R: No sé, leí el otro día un comunicado que decía que iban a parar todo el año que viene (risas). Igual se separan... Yo creo que sí, tío, que directamente les he tocado con la varita mágica, y van a fracasar. A partir de ahora les toca alcanzar esas más altas cotas de la miseria (risas).

P: Ya llegando al final de la entrevista... ¿Prefieres dar conciertos o grabar nuevo material?
R: Hombre, a mí me gusta estar vivo, y luego a partir de ahí la consecuencia es que como soy muy gandul, pues lo que hago es ir haciendo canciones de cuando en cuando. Pero lo de dar giras y eso generalmente me aburre bastante. O sea, cuando empieza la gira la coge uno con alegría y tal, pero ya cuando lleva una temporada... Me gusta, ojo, pero me aburre bastante. Prefiero hacer canciones, es lo que más me gusta del mundo, escribirlas y eso. Luego ya lo demás, pues bueno, se hace, estás ahí y dices “vamos a dar una vuelta” y tocas por ahí. Pero lo que más mola del mundo es el acto de crear, de hacer canciones, que me parece verdaderamente lo más bonito de todo eso.

P: Ya la última pregunta de la entrevista... Tienes una voz y una forma de cantar muy características, que han llevado a muchos a compararte con Lemmy Killmister, de Mötorhead y a considerarte una de las mejores voces del rock español. ¿Habilidad natural o años de entrenamiento?
R: Yo la verdad es que me considero un cantante bastante malo, pero bueno, si la gente dice eso, pues oye, muchas gracias. Yo generalmente ya ves que me cuido poco... Como el Lemmy, bebo ron, fumo mucho, me gusta gritar... Lo que sí que no intento es hacer cosas que no sé, lo cual la gente debería hacerlo, es mucho más saludable... Intentar hacer cosas que no sabes, ¿para qué? Yo sé perfectamente cuales son mis limitaciones, y a partir de ahí, pues voy haciendo... Pero bueno, gracias por el piropo, hombre, a mí que me agrada.

P: De nada, hombre. Y lo que es la entrevista, creo que ya está...
R: Pues muy bien, chavalote, espero que te sirva para algo.

P: Eso espero (risas). Muchas gracias.
R: A ti, campeón, un abrazo.

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